Por Pastor Adán Vásquez
Mateo 4:4
El respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.
El pasaje que ocupamos en nuestro devocional de hoy es muy interesante porque asimila la necesidad que deberíamos tener de la Palabra con algo que hacemos todos los días, comer. Sabemos que el ser humano no puede vivir sin los alimentos porque es una necesidad esencial.
Las Escrituras nos hacen ver que así como necesitamos la comida material también debemos alimentarnos con la Palabra del Señor. La Biblia es la que da el sustento que la vida necesita para estar sano espiritualmente.
Este versículo se encuentra en el contexto de la tentación de Jesús mientras estaba ayunando en el desierto, los versículos anteriores dicen que el diablo tentó a Jesús diciéndole que convierta las piedras en panes. El enemigo sabía que Jesús tenía hambre, debemos recordar que nuestro Señor experimentó las mismas necesidades como nosotros, la diferencia es que Él es Dios. Pero Jesús no accedió a la voluntad del enemigo sino que le respondió con la verdad que nosotros debemos utilizar hoy ante las tentaciones, Él le dijo que la necesidad del hombre no solamente consistía en asuntos de alimento material sino que también es necesario atender la necesidad espiritual, la cual, se satisface con la Palabra de Dios.
El Señor dejó estas palabras para darnos la enseñanza que en esta vida debemos sentir y atender nuestra necesidad espiritual día a día. Todo verdadero hijo de Dios debe tener un apetito especial por la Palabra del Señor para alimentarse espiritualmente y para deleitarse en el mensaje que Dios tiene para él.
Apreciable hermano, ¿de qué manera está alimentando su alma? Le hago otra pregunta: ¿con qué está alimentado su necesidad espiritual? Todavía le hago una pregunta más: ¿está alimentando su corazón con la provisión que Dios ha dejado? Mi intención no es hacerle interrogantes acusatorias; el propósito de todo esto es hacerle conciencia de la necesidad que tenemos de alimentar nuestra alma con lo que Dios tiene que decirnos cada día. Lamentablemente hay muchos que se hacen llamar cristianos pero están alimentando su espíritu con las perversidades de este mundo, y cada día muestran mayor indiferencia al mensaje de Dios para atender los consejos malignos de Satanás.
Le invito a deleitarse en la voz del Señor, lea la Palabra, escúchela y medite en ella para encontrar el mensaje que Dios tiene para su alma, le aseguro que encontrará una satisfacción que no se puede comparar al mejor manjar que usted haya saboreado materialmente. ¡Vamos! alimentemos nuestra alma con el pan espiritual.
ORACIÓN: Señor, gracias porque tenemos acceso al pan espiritual para nuestras almas, ayúdame a satisfacer mi hambre espiritual con la Palabra, hazme sentir mi necesidad de tu alimentar mi alma con tu mensaje cada día. Amén.
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